EL ORIGEN DEL APELLIDO “AZNAR” DE MESONES
AZNAR, antiguo apellido aragonés, con origen en los Pirineos, estaba ya en esta comarca en el fogaje de 1495 de Trasobares, con 5 fuegos, y en Oseja y Tabuenca con dos, venido quizás ya con los primeros repobladores con la reconquista de estas tierras en el siglo XII, desde donde se extendió a otros pueblos de la zona, como Illueca. Severino Aznar Embid, aragonés insigne, famoso político y procurador de las Cortes en Madrid, nacido en Tierga el 10 de febrero de 1870, vendría de aquí. Falleció en Madrid el 19 de noviembre de 1959. Los padres de Severino, Simón Aznar Fajardo y Tomasa Embid Gaspar, eran naturales de Illueca. Sus abuelos paternos fueron Félix y Petra Fajardo, ambos naturales de Illueca y los maternos, Antonino y Brígida Gaspar, el primero natural de Illueca y ésta de Gotor.
Según Wikipedia, “Aznar es un apellido patronímico español de origen aragonés y de etimología discutida. Antiquísimo y de muy alta condición, muy vinculado a la historia de Aragón, su primitiva casa solar pudo radicar en Jaca (Huesca). De acuerdo con el INE, Aragón sigue siendo porcentualmente la zona donde mayor población lleva el apellido”. Se da sobre todo en Zaragoza, siendo notable también su presencia en Barcelona, Valencia y Alicante.
La primera referencia que se tiene de este linaje se remonta al conde de Aragón Aznar I Galíndez. Su hijo, Galindo I Aznárez fue conde de Urgel y de Cerdaña hasta el 844 y, después, de Aragón desde ese año hasta el 867.
EL ORIGEN DEL APELLIDO “AZNAR” DE MESONES
AZNAR.- En el censo electoral de 1910 de Mesones vimos a Cosme Aznar Lou, de 34 años, “comerciante” (tendero). Y en el de 1934 estará con sus hijas Adela, Carmen y Miguela; hijas de Felisa Benedí, de Lucena de Jalón -hija de Santiago, de Trasobares, y de María Sisamón, de Mesones-.
Felisa era hermana de Raimundo Benedí Sisamón (aparece ya éste en el censo electoral de Mesones de 1901), casado aquí con Adela Gil Gil, venido a Mesones desde Ricla, de donde era Cosme Aznar. Éste y Felisa tuvieron aquí también a Raimundo y a Aurelio que murieron pronto.
Sus hijas, que tuvieron también tienda, fueron conocidas siempre en Mesones como “las Cosmas”. Aún fuimos a comprar a sus tiendas muchas veces. Entonces los chicos estábamos “bien mandaos” (las madres entonces tenían también muchas faenas). Cuando las Cosmas cerraron, porque se hicieron mayores, tuvieron que abrir otras, para los más jóvenes, ya más conocidas: la de la Esther (antes la tuvo su padre), la de la Fina (la del Spar), la de la Gloria y la de la Ángeles, la telefonista; después ya vino la de Domingo, el de la Eugenia.
Desde luego, esa placa no tiene desperdicio alguno.
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