OTRAS DIEZ “CLAVES” PARA SABER QUE EL CASTILLO DE MESONES LO HICIERON LOS TEMPLARIOS (1ª PARTE)
Alguno me dijo la otra vez que el artículo anterior de las 10 “claves” era muy largo; y yo entiendo que era porque resultaba algo pesado para leer de un tirón. Y ya sé que esto de leer cuesta mucho, no lo hacen ni los que después quieren hablar de lo que no han leído. Por eso lo voy a poner en dos partes, de cinco “claves” cada una, para que resulte menos pesado. Además, ya he visto que estas nuevas “claves” son más “largas” y que alguna la he tenido que modificar y ampliar y hasta “crear”, como veréis. Y lo de la introducción, como también veréis, lo ha rematado.
Tampoco pensaba sacar esto tan pronto pero, como veréis, es obligado sacar este en concreto ahora para desmentir “invenciones” de la gente sobre el castillo (ya que son todas “gratuitas”, sin ninguna prueba; y, claro está, dicen lo que les parece sin saber aún nada de este castillo, haciéndole mucho daño a Mesones, a la Historia, a Aragón y a España, y confundiendo y desinformando a todo el mundo (de lo que se aprovecharán otros que están intentando ocultarlo todo, vamos, frotándose las manos): solo diciendo alguno que este castillo no puede ser templario, sin conocerlo de nada, y sin haber leído todavía nada (como ha ocurrido ahora), la gente puede sospechar que si lo dice será por algo; aunque sea un ceporro, pero eso no lo sabe aún nadie).
OTRAS DIEZ CLAVES PARA SABER QUE EL CASTILLO DE MESONES LO HICIERON LOS TEMPLARIOS (1ª PARTE)
Mantengo lo del título, ya que en el otro artículo ya dije que igual ponía después OTRAS DIEZ (las tengo ya “sacadas”). Pero, alguno ya sabrá que no solo seguirá habiendo otras diez, sino muchas más. Porque estos artículos de las “claves” son solo un resumen del resto de los artículos, como ya dije, y haber hay ya unos cuantos (y a lo mejor si hay tantas -“claves”- es por algo):
Entre el libro y el cómic de Eloy, lo que dijo Alberto del castillo (en realidad, muy poco, como reconoció él, y resumido “a tope”, porque ya no “tenía más sitio”) y todo lo de este blog de Mesones y su castillo (y lo del “Face”, que también es “gordo”), sin contar ya las páginas oficiales y los informes correspondientes de “restauraciones” (y sin contar ya tampoco todo de la capilla, de la que ya se ha hablado y escrito también lo suyo; por la importancia que tiene), y todas las páginas privadas de internet y publicaciones diversas que hablan del castillo; igual no existe un castillo del que se haya hablado ya tanto; y espera lo que le falta, sobre todo, como alguien empiece a comentar cosas que no “entienda”, como he dicho antes.
Lo digo, como ya sabemos, por gente que puede tener la tentación de hablar del castillo sin conocer nada o, al menos, sin conocerlo todo (se supone, todo lo que se conoce hasta ahora del castillo), que es lo mismo. Desde luego, esto es una grave imprudencia y solo puede servir (además de para malmeter y confundir a la gente, y obligarme a sacar otro artículo) para hacerse mal uno mismo; vamos, como ya ha dicho alguien (acertadamente), para “retratarse” y salir “bien guapo” en las fotos.
En estos casos es mejor estar callado y solo hablar cuando uno sepa, al menos, lo mismo que los demás (y con cuidado, porque te pueden pillar en un fallo si no eres listo). Si no, uno siempre está en desventaja -lo cual no es justo- y puede quedar mal parado (algunos historiadores del arte del castillo, ya sabemos, estuvieron bien callados -aún lo están, por desgracia-, aunque vieran cosas raras; por lo de no salir “mal parados”; ya sabemos también que de la Virgen decían que sería de finales del XIV o del XV, por lo del castillo: claro está, si no hay castillo, no hay Virgen).
Uno, que se ha preocupado siempre por esto, como todos saben (no soy yo), aunque no sea de aquí, ya ha dicho claramente en este blog que si este castillo no lo hicieron los templarios no lo pudo hacer nadie. Por los comentarios que ha hecho hasta ahora, merece toda la credibilidad. Y estoy totalmente de acuerdo, como que para que vengan algunos ahora (“demostrando lo que saben”; prácticamente, nada; digo, de este castillo) diciendo que no lo pudieron hacer nunca los templarios, y sin aportar prueba alguna, sólo diciendo que ellos “saben mucho de castillos”; y, creo, sin haber leído todavía, ni siquiera, el libro de Eloy, ya que si no, no se explica, en absoluto; o es algo “muy raro”, desde luego (alguna publicidad le tengo que hacer a Eloy después de todo lo que ha hecho por Mesones y su castillo; y también por la comarca, aunque esto nunca se lo han reconocido, al revés, han tratado siempre de “hundirlo” -supongo que alguien tendrá que tomar cartas en el asunto algún día e investigar bien todo esto y dejar “fuera de juego” al responsable; algo de esto ya lo vimos en el “Face”; pero eso no ha sido nada; lo han querido “borrar” del mapa de la comarca, como muchos sabemos; seguramente, es todo por envidia-).
Y es muy bonito decir (a alguien famoso; poniéndome antes a mí verde, llamándome “marciano” -prácticamente, lo que dijo es eso-) que es muy inteligente y muy listo y “muy todo”, y después decirle, prácticamente en su cara, que es también un “marciano”, como ha hecho alguien; aunque él diga después y jure después siempre, si le preguntan, que eso no es cierto, que no lo ha dicho nunca, poniendo sus “palabras textuales”; igual se piensa que aquí somos todos tontos, hasta el mismo Eloy también (por eso digo, que igual es que ni siquiera se ha leído nada, es que no parece que haya otra explicación posible; ya sabemos que lo de leer todo, cuesta; es menos esfuerzo ver solo los “santos”; y esto lo comprendo porque a mí me pasa lo mismo, como a muchos). Aunque, conociendo la buena persona que es Eloy, se lo perdonará todo, seguro, solo sentirá compasión o pena.
Pero, antes de poner las cinco “claves” de este artículo hay que hacer una precisión, en relación con lo que el de antes dijo de las “claves” del artículo anterior. Si a él (seguramente, al “más listo”, como se “retrató” él mismo -esto del retrato, como ya he mencionado, lo dijo alguien y veo que viene muy bien al caso-) le ha pasado, igual le puede pasar también a otros.
Y es que, aunque parece que se entiende, también parece que no es así:
Cada “clave”, como se puede suponer, no comprende el alfa y la omega, el principio y el final; es decir, cada “clave” por sí no demuestra al 100% que el castillo de Mesones lo hicieran los templarios (aunque, a lo mejor, alguna sí), como quería que fuera esta persona; poniendo, además, el ejemplo de varias “claves” que saqué.
Que una clave lo demostrara todo, al 100% como digo, tendría que ser, por ejemplo, el encontrar en el castillo, en algún escondrijo, algún plano del castillo del s. XIII, sobre todo, que pusiera el año, con el sello de los templarios y, por si acaso también (siempre habría quien pediría más; los hay para todo), con el nombre y la firma del maestre del busto de la ménsula del castillo. Pero, esto ya sería pedir mucho (como sabemos, del castillo de Sádaba tampoco existe documentación alguna y aún no se sabe quién lo hizo; aunque ya les dejamos unas pistas muy buenas por si alguien quiere seguir tirando del hilo).
Pero, ya hemos visto, pues, a alguien que lo ha pedido: que pusiera yo una “clave” que lo demostrara todo (como he dicho, luego veremos que igual hay una; aunque esto va por “gustos”). Seguramente habría querido que lo hubiera hecho también con las diez, “claves”; si no, para qué las pongo, diría. Quizá sea porque “el más listo”, como dijo él, no se ha enterado aún de nada; seguramente, porque no ha leído lo que tenía que haber leído para poder después hablar de las cosas. Y, sobre todo, parece que tiene que leer aún mucho de “arquitectura” y “estilo” “templario”, que dijo que sabía tanto (como también dijo otro que “picó” -como dijo otro-, y al que el “otro” le “aplaudió”; esto se suele hacer entre “compañeros”; hasta el administrador, como vimos; esto es ya mucho más grave; esa página ya no merece ningún respeto, es ya algo “muerto”).
Lo malo, para ese “estudio de arquitectura templaria”, es que todo el mundo sabe que no existe nada de eso (ya lo dijo también Eloy en su libro; vamos, y es lo que dicen los libros; aunque en esto siempre habrá algún “disidente”, como en todo, seguro; e igual hasta con razón). Lo que sí existen son los signos de cantero, para conocer una “arquitectura templaria”. Sobre todo, tendrán que leer a Bozal y estudiar todos los signos de los castillos templarios, según su época, como todo. Entonces, igual llegan a la conclusión, por sí solitos, de que éste es un castillo templario y, como dijo alguien, que si no lo hicieron los templarios, no lo hizo nadie.
Lógicamente existen castillos que se cree que son templarios (aunque muchas partes no lo serán -lo de los signos puede ayudar mucho-) de los que se pueden estudiar sus elementos y ver si existe siempre algo común; aunque, como me dicen, las cosas comunes que haya tienen que ver, por lo general, solo con su época; aunque esto a veces haya que buscarlo algo más lejos (como puede ser en el caso de Mesones, como nos dijo Eloy; y de esto parece que algunos “expertos” no se han enterado aún).
Y siguiendo con lo anterior, este hombre criticó (entre otras “claves”, como ya he dicho) que la puerta elevada (la 1ª “clave”) no demostraba que el castillo lo hicieran los templarios. Se puede decir esto mismo, aunque de otra manera (y no como dijo todo, “riéndose”, como nos dijo Pedro -aquí, el hombre, se tuvo que hacer “mucho daño” con ese “retrato”-), y casi no pasa nada. Ahora, sin embargo, ya hay que decir esto: que hasta el más tonto lo sabe, sin duda, que esto, por supuesto, no demuestra que el castillo lo hicieran los templarios. Por lo que se debe pensar ese hombre que por aquí, como ya hemos visto antes, estamos muchos tontos, por decir estas tontadas. La verdad, cada uno se “retrata”, como ya ha dicho alguien también, como puede, o como sabe. Y se ve que a alguien no le da para pensar el por qué está ahí esa “clave”, que no demuestra que el castillo lo hicieran los templarios: si D. Lope no hizo el castillo (entre muchísimas otras “claves”, por ésta), pues habrá que pensar en otro candidato y, de entre estos, ver quién puede tener más posibilidades de haberlo hecho. Aunque esa entrada en recodo en altura, ese impresionante “acantilado artificial”, junto a la “puerta elevada”, esas dos torres poderosas, etc, etc, a Eloy ya le dijeron mucho. Igual a otros no le dice nada todo esto, aunque “sepan mucho de castillos, o de todo, como parece ser este caso”, que es lo que parece; de Historia ya veremos que también “sabe”.
Por tanto, y para que alguno nos entienda, resumiendo (y ya no pongo más “claves” que dijo, no merece la pena y se va a hacer esto muy largo): como decía mi abuelo (le gustaban muchos los refranes; antes, era la cosa así), un grano no hace granero, pero ayuda al compañero; igual se entiende mejor así todo; o igual hay que poner también un ejemplo más, por si alguien no lo entiende, el del puzle: que, al final, se va viendo el cuadro.
1ª.- El documento de 1266. Es algo parecido a lo anterior, como veremos (del que habla sin saber nada). Lo puse también sobre la mesa, aun no estando en las “claves” de ese primer artículo de las “claves”. Ahora sí que, definitivamente, lo rescato para estas nuevas “claves”, ya que viene al caso.
No creo que lo leyera este hombre, ni que lo haya leído (y espero que ya no lo lea, ni lea nada más de lo que escriba; además, se lo rogaría de veras; mi corazón igual no aguantaba y tendría que trabajar otra vez de lo lindo), pero ese no es mi problema. Solo parece que vio que en ese documento se nombra a un castillo en Mesones en ese año. Su reacción, como ya hemos visto con lo anterior y, visto lo visto, fue la lógica y esperada: ese documento solo demuestra que en Mesones en ese tiempo había un castillo. Fin.
Pero es que esto lo sabe ya todo el mundo (como lo de la puerta elevada), también se piensa, pues, que también somos aquí todos tontos, como antes; menos él, por supuesto. Todos sabemos también que en todos los pueblos había un castillo (hasta en Corna, como vimos, porque también sale en el documento, el pueblo y su castillo; donde ahora ya no hay ni rastro del pueblo, ni del castillo), como para no haberlo en Mesones, con esa situación estratégica en la que se encuentra el cerro del castillo.
Esto debieron buscarlo también aquí los templarios; un cruce de caminos; ya que antes todo se hacía a pie, en caminos de caballerías, o de herradura, como se decía; y, como ya puse, en Gotor hay un camino que se llama Camino de Santiago, que viene de Mesones, que no pasa por ese pueblo, sino por el campo, como le llaman ahí al monte. Y desde Mesones hasta Santiago se pasa justo por San Bartolo, marcando la línea recta (como ya dije). Y de Mesones a Ricla. Y nadie se explica qué hace el castillo templario de Montalbán (con los mismos signos de cantero; podéis ver fotos), en la provincia de Toledo, en medio de la nada, donde nada defiende. Sin duda, tendrá que ver con esas líneas imaginarias “templarias” de lo que tanto se habla; habrá que estudiar mucho más a los templarios, sus simbologías, su misticismo, sus representaciones, y hasta sus propias “creencias”, fruto del conocimiento de las grandes culturas del pasado; y el castillo de Mesones puede ser, sin duda, una de las mejores “representaciones” y, por ello el lugar idóneo para el estudio de esta cultura templaria.
Todos los documentos antiguos que hablan de Mesones son fundamentales para conocer la historia de esta población y de su castillo (como hemos ido viendo ya de su importancia); pero, quizá éste lo sea especialmente, y también es interesante porque es la primera vez que se habla, en la documentación antigua de Mesones, de un castillo. Si, como ya dije, cuando se empezó a estudiar el castillo “a fondo” (con las dos tesis) el documento más antiguo conocido que hablaba del castillo era uno de las obras de D. Lope (ni siquiera citan el de la orden de aparejamiento del castillo de 1357) y se pensó por ello (y por sus escudos) que este castillo lo había hecho él, a éste igual hay que darle también alguna importancia, digo.
La importancia de ese documento estriba no en que hable de un castillo, como ya he dicho, sino en la fecha del documento y en el propio contenido del mismo. Claro, si uno no se lo lee, cómo va a opinar en igualdad de condiciones, no es justo. Por tanto: estamos, pues, en 1266 cuando el rey Jaime I (el rey “templario”, o el rey “murciélago” -símbolo templario; ya vimos este significado”-) entrega a un noble (vamos, más bien, lo pone “bajo vigilancia” de los templarios) la mitad de su parte sobre Mesones y su castillo. Y conociendo después la historia de Mesones (si no, no hacemos nada) sabemos que muchos años después sigue estando ese hombre en Mesones, con los templarios, que permanecerían aquí hasta 1312 (ya vimos también que por ese tiempo se citan las posesiones del Temple de “Masones”).
No creo que residiera en Mesones el noble, estaría más en Jarque o en Zaragoza, en la “capital” (en Corna, tampoco; debía ser un castillo muy “pequeñico”); y ya vimos que no se llevaba bien con los templarios, que se debían llevar mucho mejor con los habitantes de Mesones, como pudimos comprobar (ya vimos cómo defendieron los templarios a los de Mesones, porque les quería engañar ese “señor”; cuando los “extinguieron” lo tuvieron que sentir, seguro, aunque fueran moros; aunque la mayoría eran rubios y pelirrojos).
Y llegado este momento tenemos que leernos ya los dos capítulos de las “escrituras del castillo” (y conocer también la historia de Mesones; si no, no hacemos nada) para poder saber que desde esa fecha ya nadie más pudo construir aquí este castillo, por lo que en 1266 ya estaba el actual castillo. Por tanto, si ese documento solo indica que en Mesones había un castillo, es que algo fallaba en ese comentario (claro, lo de la lucha “injusta”, como siempre, al hablar sin conocer nada).
http://www.castillodemesonesdeisuela.com/2022/03/las-escrituras-del-castillo-1-parte.html
2ª.- La cripta templaria. En el artículo del pasadizo subterráneo del castillo pudimos ver un artículo en el que “los templarios, de origen galo” buscaron un lugar en las montañas de Extremadura e hicieron una cripta donde entronizaron a la Virgen. He escogido solo el párrafo donde lo dice:
“Ocurrió en esta época (mitad del s. XIII; como dice antes el artículo) un hecho importante que hubiera de marcar el futuro de esta comarca. Los caballeros templarios, de origen galo, buscaron aquellos sitios marcados por los druidas, donde posiblemente rindieran culto estas religiones pre-cristianas celtas, con una significación sagrada muy remota, con lo cual absorbían toda la carga de espiritualidad de los habitantes. En nuestra zona, los caballeros hallaron un lugar de estos (es un lugar de cuevas que utilizaron los hombres prehistóricos y con restos antiguos; quizá, algo como donde está nuestro castillo; ya sabemos todo esto de nuestro pueblo de sobras; en ningún sitio he visto más vestigios, como sabemos, y de todo), el que en la actualidad ocupa el Santuario de Belén. En él se instalaron y construyeron su cuartel (que aún se conserva, habiendo llegado intacto hasta nuestros días), de dos plantas y hermoso patio central, de estilo románico. Junto a él construyeron una cripta donde entronizaron a Ntra. Señora de Belén.
El culto a nuestra señora fue creado por San Bernardo y venía a relevar al de la diosa madre céltica. Esta cripta o capilla fue derruida más tarde para construir, adosada al antiguo cuartel, la magnífica iglesia que hoy existe. Con tal entronización recogieron el legado representado por las costumbres y cargas de espiritualidad que para las gentes del lugar poseía el sitio de culto, peregrinaciones, milagros, promesas, etc. y todo ello, sin duda encuadró dentro de un plan preconcebido de civilización, del cual formaba parte la intensificación de la agricultura, la ganadería, la artesanía y el comercio”.
Vemos, pues, que en Mesones hicieron lo mismo, y que al final ocurrió también lo mismo que allí; que dicha cripta o capilla fue sustituida por una iglesia, en Mesones, la actual ermita de la Virgen de los Ángeles.
Como ya he dicho en otros artículos, desde siempre vimos el hueco en el suelo, junto al muro este, con una pequeña ventana en lo más bajo del mismo, donde estaría la cripta y la capilla templaria del castillo arriba. Hoy está ya todo enterrado, casi igualado con el suelo de la entrada al castillo. Ya sabemos que allí existió, pues, una capilla y una sala subterránea (la que haría de cripta; debajo del ábside de esa capilla). Vemos todavía el ventanal arriba del muro y los dos agujeros, justo debajo, en el punto y altura exacta donde iría el altar, pegado a ese muro; sin duda, el mismo altar que hay hoy en la capilla de la ermita, pegado también a la pared de la torre.
Que viéramos en las otras diez claves, la basa de la Virgen (metida en una reconstrucción de almenas de D. Lope), estuvo bien; una virgen en un castillo. Pero que veamos ahora también dónde estuvo esa basa y esa Virgen en ese castillo (la antigua capilla y la cripta templaria), creo que también. Y sabemos que en esa pequeña ventana de la cripta, ahora enterrada, no estaban los calabozos templarios (ya sabemos también donde estaban, mucho más bajos; como correspondía; a la misma altura de los de D. Lope, lo más bajo del castillo, en esos subterráneos). Y ya vimos que era una ventana bien protegida por signos de cantero (tres signos de la Virgen, signos de cantero como en Castellote, Castejón o San Bartolo; en las tres piedras principales de arriba -se ven muy bien los signos desde fuera-). Esto de los signos ya sabemos lo que eran, y que, sobre todo, los ponían en las ventana de los edificios religiosos, para que no entrara el demonio. Aunque en Mesones están por todos sitios (ya sabemos también por qué).
Pues bien, ¿qué hace una capilla y una cripta, y una Virgen, en un castillo antes de D. Lope? (que era arzobispo; aquí ya no se podría, pues, hacer esa pregunta). Y ya sabemos que la devoción a la Virgen la introdujo San Bernardo, con el Cister y los templarios. Y que en Mesones eran todos moros, y que los únicos cristianos eran los templarios del castillo, desde 1173. Ya vimos las tablas del altar con esos signos de la Virgen, aún más antiguos, como el cuadro de la sacristía; sin duda, todo, como ya sabemos, y la Virgen con su basa, estaría ya en el “otro castillo”, antes de construir este; donde estaba la “vieja” piedra del trébol, ahora en la almena del campanillo (después, ya sabemos, pusieron otro -trébol- en una ménsula del nuevo).
Y uno piensa también qué coño hacen dos incensarios (además, de los caros, como vimos) en un castillo, cuando estos signos de cantero solo se encuentran en iglesias o catedrales. Nosotros ya lo sabemos todo, pero el que no sabe nada se puede sorprender; o igual no, alguna excusa se buscará, aunque lo del “retrato” nunca falla.
Desde luego, todo esto, esta clave, por sí, tampoco demuestra, al 100%, si nos ponemos “cabezones” (ya se sabe que es el que no atiende a razones), que el castillo lo hicieran los templarios; sobre todo, para el que diga que se hizo en otra época en la que no estuvieran en Mesones los templarios (aunque ya vimos que no era posible), o que el castillo solo lo hiciera el rey y los templarios solo se aprovecharan de ello y, por ello, fuera una construcción “civil” “real” (pero con lo de la capilla, la cripta y la Virgen, y el RESTO DE LAS “CLAVES”, ya daría mucho que pensar; y el rey no estaría para regalar nada).
3ª.- Las ménsulas del castillo. Ya las vimos en su artículo. Sin duda son también una prueba importante. Sabiendo que este castillo es anterior a D. Lope (que solo ponía en las ménsulas su escudo con la luna, como ya sabemos), ¿quién va a poner por el castillo en las ménsulas un ángel, un murciélago, la escena del baño de Jesús o el águila de San Juan con su pergamino (los evangelios de San Juan; lo del tetramorfos)?; esto último en un sillar, quizá, cogido de la capilla templaria. Cuando la única orden religiosa que estuvo en Mesones fue el Temple, en un pueblo de moros.
http://www.castillodemesonesdeisuela.com/2022/05/las-mensulas-del-castillo.html
O un trébol gótico (a mitad del siglo XIII ya estaba en España el gótico; en realidad, asemejando a uno de 4 hojas, como sabemos) y la escena de la lucha del caballero y el león. Esto último nos lo contó perfectamente Eloy en su libro y es, sin duda, una de las “claves” más importantes, sobre todo, porque nos dice el momento en que se pudo construir el castillo. Me remito en esto a su libro. Nadie lo contaría mejor. Y lo que tienen en común estas dos representaciones es que ambas están también, juntas, ya es extraño, en una iglesia templaria inglesa del siglo XIII. A lo de las coincidencias, igual hay que hacerles ya algo más de caso.
Y, por último, lo que parece ser el busto de un maestre de la orden (barba, pelo largo y capa), con unos pergaminos detrás (quizá, las Sagradas Escrituras y los Evangelios) y con un escorchón en el hombro izquierdo (donde llevaban la cruz templaria). Ya sabemos también todo esto de los “escorchones” en las figuras (el trébol, el león, la cruz del maestre, las dos ménsulas repicadas de la torre central norte y el escudo con la cruz patada de la dovela central, inclinada, de la puerta elevada, la original del castillo). No sería cosa de D. Lope, sino del rey para quedarse ya con Mesones, todo para él, como vimos en el artículo de Cabeza del Buey, cuando la supresión del Temple.
http://www.castillodemesonesdeisuela.com/2022/10/el-famoso-pasadizo-subterraneo-del.html
(al final del artículo)
Y, quizá, lo del murciélago sea lo que más llame la atención y lo que más curiosidad despierte. Ya expliqué todas estas significaciones, y también su relación con el rey JAIME I, como sabemos, el rey templario, o el rey “murciélago”. Ya vimos que el significado de “el Conquistador” le viene de aquí, del murciélago (hay que leerse ese artículo, si no, no se comprende nada; ya sabemos que todo esto es un resumen de los artículos publicados en este blog, por lo que el que no se haya leído “todos”, se podría decir, no tiene, ni siquiera, el “derecho” a poder opinar de nada; y es que si no, solo para “malmeter”, sin saber nada, puede hacer “mucho daño”, como lo están haciendo algunos “gratuitamente”; no son conscientes, desde luego; hay que ser un poco responsables; si saben “todo” y opinan de ello, no hay ningún problema; pero, al menos, que sean, aunque no sean “expertos”, coherentes con lo que dicen, al menos, cuando lo sepan “todo de este castillo”; si no, no harán más que meter la pata y “hacerse daño a ellos mismos”; porque les voy a contestar; no voy a “arruinar” Mesones y la Comarca; y tampoco a Aragón y a España- y confundir a la gente, vamos, “engañarla”, aunque no sean conscientes de ello, lo de la “ignorancia”).
En Mesones, como en Sádaba, como ya dije, la figura del rey Jaime I puede ser “CLAVE”. Sin duda, era muy “listo” (le habían enseñado muy bien los templarios cuando era “pequeño”, -ya dije todo esto también- y después siguió siendo uno de ellos, como todo el mundo sabe -aunque esto se haya querido ocultar a lo largo de la Historia, como sabemos; lo de la “condena del Temple”-). Ya vimos el cuadro en este blog, que venía ya del “Face” (entrando en Valencia en la conquista con el “uniforme templario”). Hasta el punto que preparó (restando los recursos de muchos sitios, como en Masones -ya lo vimos también en la “documentación”-), la conquista de Tierra Santa, otra Cruzada.
Si en Mesones fueron los templarios, en Sádaba fueron los hospitalarios (esto aún no lo pone ningún libro, como lo de “Castejón”); las dos órdenes militares que le habían ayudado al rey en la conquista de Mallorca y Valencia. Y esto lo supo utilizar muy bien también después el rey (era muy “listo”) en la defensa del reino frente a Castilla (Mesones) y Navarra-Francia (Sádaba), con estos castillos. Hay que leerse también el artículo del castillo de Sádaba que saqué en este blog. Seguro que ésta es también una buena “clave” (para el que “quiera” entenderlo).
http://www.castillodemesonesdeisuela.com/2022/04/el-castillo-de-sadaba-visto-desde.html
A los templarios les interesaba Mesones (ya vimos por qué, y lo seguiremos viendo ahora) y al rey, seguramente, mucho más, para defender la frontera con Castilla; y a los hospitalarios Sádaba por estar junto al “principal” Camino de Santiago, para ejercer su influencia sobre Europa, donde tenían inmensas propiedades (esto ya lo dije también; no voy a repetirlo más), pero aún más al rey, al estar en la frontera con Navarra, población que había recuperado hacía muy poco y a la que le dio también en ese momento (el mismo año que a Mesones, 1263) sus “privilegios”.
Sin duda, la historia de estos dos castillos (los dos en el “estilo Felipe-Augusto” -seguramente, casi los únicos, junto con Castejón de Monegros-; influencias de Europa, traídas de las Cruzadas por las órdenes religiosas), construidos, como vimos, a la par, por dos órdenes “religioso-militares” (después de la conquista de Valencia), tienen mucho en común, y esto es, sobre todo, la figura de un rey “muy listo”, Jaime I, el rey “templario”. Más tarde, ya nos lo dijo Eloy, no se pudieron hacer castillos “defensivos” como estos. Nadie tenía ya el dinero para hacerlos, ni D. Lope en Mesones, aunque se gastara lo suyo (el de Castejón, ya dicen que fue también “un enorme castillo”, también, del siglo XIII, hoy casi desaparecido; aunque ya hemos visto que fue “templario” -esto aún no lo dicen los libros-).
No entiendo cómo los historiadores del castillo de Mesones y del de Sádaba no se hayan dado cuenta nunca de nada. Sin duda, es algo muy raro. Deberían saber todo esto hace ya muchos años. Porque esto se ha descubierto sin hacer ningún tipo de excavación, TODO ESTABA A LA VISTA. En relación con Mesones, estoy seguro que esto no se ha llegado a saber hasta Eloy porque cuando García Atienza dijo que el castillo de Mesones era “claramente un castillo templario”, nadie le hizo caso; para no destapar, quizás, las “vergüenzas” de los que antes habían opinado otra cosa, de los que estarían metidos, quizá, en las “páginas oficiales”, o de los que no se preocupaban “más que de lo suyo”. Y, ahora, parece que está ocurriendo lo mismo, hasta que alguien, después de Eloy, quizá, 50 años más tarde, vuelva a decir lo mismo, y esta vez tenga más suerte; porque alguno que esté por allí “metido” se dé cuenta de la injusticia que supone “engañar” a la Historia, y a todo el mundo, como está pasando ahora.
Las Instituciones podrán decir, “porque no se preocupan de nada” (más, seguramente, que de los intereses de los que están por ahí “metidos”, aunque sea algo vital para Aragón o para España) que “hasta que no nos presenten un informe científico de algún catedrático (como realmente han dicho) no vamos a hacer nada”. Contratar, pues, con vuestro “bolsillo” a alguno que lo diga, y punto, y no perjudiquéis más los intereses de Aragón, y de toda España, vamos.
4ª.- Los escudos “templarios”. Costó más encontrarlos (que los de D. Lope, que están a simple vista) pero ya vimos también que había unos cuantos. Pero, sin duda, el “mejor de todos” es el de la clave de la cúpula de la almena alta (la única torre más alta del castillo). Alguno, solo con esto, podría ya convencerse (sabiendo la historia de Mesones) de que este castillo lo hicieron los templarios. El escudo no puede ser otro, enmarcado en una cruz templaria que aparece en el octógono en el que se encuentra, que el de la orden del Cister; y unidos los dos, el de San Bernardo de Claraval, el patrón de los templarios (ya sabemos todo esto; me remito a los artículos publicados; no se puede repetir nada, salvo que se aporte algo más). Los templarios pusieron a su patrón (para que les protegiera, desde lo más alto) en la parte más elevada del castillo.
Pero, alguno ya ha dicho (lo vimos en el “Face de Mesones”, dado que se parecía; vamos, que podría ser por la forma) que es otro escudo, que no es el de San Bernardo (y se quedan tan tranquilos; y no dicen que puede ser; sino que es, con dos…). Las pruebas son que como el castillo no lo terminó D. Lope, como dicen, que tampoco terminara esa almena y que fueran sus sobrinos los que la hicieran. Aquí, de momento, no creo que haya un cambiazo, como con el escudo de la sala de la Felipa.
Pero, eso ya hemos demostrado que no es posible, que no es un escudo de los Urrea, por MUCHÍSIMAS RAZONES (arcos cistercienses, el arco de D. Lope, que el castillo sí que se terminó, la torre más alta de los templarios, la octogonal, etc, etc); y los signos de cantero “cantan”, además, a muy finales del XIV o principios del XV y sabiendo de la “economía” -lo de las “cejas”- y guerras en ese tiempo de los Urrea (no voy a repetir ahora todo; todo está en los artículos).
Y es que hay un escudo de un tal Juan Manuel Urrea, poeta, de esa familia de los Urrea, de varias generaciones después de D. Lope, que tiene también esas rayas; y, parece más sorprendente, también el mismo color. No sabemos (si alguno lo sabe, que lo saque) si el heredero de D. Lope, otro Lope, tenía este mismo escudo. Y tampoco sería lógico pensar (aunque no se puede descartar nada) que el escudo familiar de estos Urrea lo hubieran copiado de este del castillo, es decir, del Cister; y es que castillos como éste no los había en todos sitios, como símbolo de su “poder”.
Y, como ya dije, por qué iban a poner también este escudo como un signo de cantero en una de las zonas de la guarnición del castillo (vamos, que ya el castillo lo hubieran hecho ellos, porque quitar un sillar para poner otro…), en la puerta de entrada a la torre sureste (la habitación del “jefe” de los templarios, mayor protección para éste); lo hubieran puesto en su palacio, digo yo; bueno, esto también ya lo dije.
El otro escudo importante “templario” es el de la dovela central, inclinada, de la puerta elevada. No hemos conseguido todavía sacar una foto buena; pero en eso estamos, para el próximo día. No cabe duda que es un escudo, repicado, en el que parece que hay dentro una cruz templaria (por la noche, con las luces, se ve esta cruz perfectamente); y hasta encima del escudo se adivina algo, como alguna corona. Ésta también podría ser una “clave”, como el escudo de San Bernardo, de esas que decía el hombre, de las del 100%, al menos, para algunos; seguro que para otros no, aunque se viera todo lo anterior perfecto.
Y también hay más escudos “templarios”, como “claves”, los que ya vimos como signos de cantero con la cruz latina y la patriarcal dentro; los que salen en las fotos de vestimentas de caballeros templarios con su armamento, vamos. Estos supongo que no se solían poner como signos de cantero en otros sitios (iglesias, catedrales, ermitas, conventos o monasterios); solo los otros que vimos que no tenían la cruz, sino solo una raya vertical como en medio. Por lo que también podría ser una pista de que este castillo, al menos, es de una orden religioso-militar; y en Mesones…
5ª.- El constructor “fantasma”. Debo reconocer que ese hombre, “el más listo”, como se definió él, claramente (después de tratarme tan mal -aun sabiendo yo que se equivocaba por completo -al menos, no aportó nada, salvo lo anterior, “que sabía mucho” -habría que hacer aquí la “prueba de la mano en el fuego”; vamos, que se juegue, por ejemplo, su casa-; al menos, un poco de “desahogo”) es un valiente (no querría pensar, porque me sabe mal, en lo del refrán, que la ignorancia es lo más… ; solo pienso que se equivocaba, porque no lo sabía todo; es lo de siempre: si no lo sabes todo de algo… casi mejor…., porque te puedes…).
Ya dije en dos artículos que el que dijera a partir de ahora que este castillo no lo hicieron los templarios debía decir ya un nombre y un momento, si no, no valía. Y lo hizo, con dos… Esto es de agradecer, por supuesto, y, además, nos dijo lo que él honestamente pensaba, también es de agradecer, por supuesto: que posiblemente hay que buscar en la guerra de los Pedros, como él dice, sobre mitad del XIV; cuando España (lo digo yo; porque lo dicen los libros) se metió definitivamente también en la guerra de los Cien Años. O algo más tarde, como él dice, cuando las “Guerras Civiles Castellanas”, cuando Enrique de Trastámara (castellano; no aragonés, pero aliado, a veces, con el rey de Aragón) se trajo mercenarios franceses para luchar contra su hermano, y que pudieron traer ahora el estilo Felipe-Augusto del castillo.
Pero, la verdad, de Historia…, se podría decir, “flojillo” (también sería porque le cogió de improviso); no sé lo que pensaría el propio Eloy de esto (cuando nos habló de los “castillos de su tiempo”) y, además, las fechas no cuadran, en absoluto. Si Pedro IV, de Aragón, ordena en 1363 derribar todos los lugares que estuvieran a menos de 15 leguas de Zaragoza, como Mesones, en la frontera con Castilla, y ya hemos visto que si no es por D. Lope este castillo ya no existiría (se hubieran llevado, como en una cantera, todas las piedras; ya vemos lo que dejaron en Castejón, solo una pequeña ermita), porque tuvo que rehabilitarlo casi todo por dentro; ¿cómo se va a estar construyendo semejante castillo en ese tiempo; porque esto no cuadra con esos mercenarios franceses de las guerras castellanas que dice. Sabemos que después de esa orden del rey el castillo fue debilitado, seguramente todo lo que pudieron (y que igual no les dio más tiempo; ya sabemos, lo del “ejército avanzando rápido”) y ya sabemos que así se quedó hasta D. Lope.
Y que estos mercenarios sanguinarios (que igual, la mayor parte, eran ingleses), como los definieron, pusieran todos estos signos de cantero “religiosos” en el castillo, hasta incensarios, capillas, vírgenes, etc, tampoco cuela.
Y sabemos también lo de la orden general de aparejamiento de 1357 dirigida por Pedro IV a Fernán Gómez (cuñado del arzobispo) sobre los castillos de Jarque, Tierga y Mesones. Y Eloy ya lo dejó muy claro (Y TODAS LAS PUBLICACIONES LO DICEN; TODOS NO VAN A SER TONTOS) que éste no es un castillo “de su época”, de la que se decía del arzobispo, o unos años antes, vamos.
La verdad, no sé por qué, precisamente, ha escogido este hombre el momento más improbable de todos. Y, como he dicho muchas veces, para qué va a reformar el arzobispo un castillo que se acaba de construir hace poco. Se suelen reformar las cosas antiguas y desfasadas, no las nuevas, como ya dije alguna vez. Pero, solo con mirarlo por dentro, como sabemos, se entiende todo; todas las reformas que hizo D. Lope. Alguien parece que esto no lo vio tampoco. Si se hubiera leído antes el libro de Eloy, igual lo sabría ya todo y no hubiera metido tanto la pata.
Que se hubiera construido un poco antes, después de la “extinción” de los templarios, ya vemos que tampoco era posible. Se conoce bastante bien ya la historia de Mesones en ese momento, los diferentes nobles que estuvieron (como vimos, después de la guerra de la Unión, muchos pueblos que habían sido de los Ximenez de Urrea en esta zona, pasaron a otra rama de estos, que apoyó al rey, emparentada con D. Lope, cuñado de Fernán Gómez; quizá, éste, el artífice de la victoria de la batalla de Épila, con los caballeros castellanos que pudieron cruzar el paso del Jalón. Y ya conocemos también el testamento de ese Fernán Gómez (parece que desde esa batalla, o poco después, estuvo ya en Mesones), que no era el “propietario” de Mesones).
Y vemos que no ha querido escoger una fecha en la que estuvieran los templarios en Mesones, quizá, porque piensa, como dijo, que no es un castillo templario; aunque tampoco hay razón para esto; también lo pudo hacer el rey, solo, en ese momento, sin la ayuda de los templarios, como ya he apuntado. Aunque lo raro es que si seguían en Mesones, al menos, colaboraran en algo al hacerlo, digo.
Como ya conté un día, uno que vio un día en una página de castillos solo una foto interior del castillo de Mesones, sin haberlo visto nunca, dijo entre signos de admiración: “románico encastrado en gótico”. Sabiendo tanto de castillos, parecería que se tendría que haber ido mejor ya a una fecha en la que aún no hubieran llegado a Mesones los templarios, más románica; por tanto, anterior a 1173. Y lo de los “estilos constructivos” en los castillos no parece que lo lleve también muy bien. Yo no sé mucho de castillos, como casi nadie. Pero, solo tienes que mirarlo en los libros. Si todos dicen que lo de las aspilleras, ya quizá pasada la mitad del s. XIV, como apunta al “momento” de su construcción, ya no se llevaban, porque ya se hacían troneras, ¿qué pintan estas aspilleras en este castillo? Igual es que los libros se equivocan, todo es posible.
Al menos, ha reconocido, y en esto se lo agradezco enormemente, no como otros que lo saben todo y no lo hacen (a ver si de esto se dan cuenta en las páginas “oficiales”; ahora tendrán que dar también éstas un nombre y un momento -como lo ha hecho este hombre-; si no, no vale) que el castillo no lo hizo D. Lope, algo importante, como digo.
Ahora, lo que más me sorprendió de todo fue que hablara de “sillares almohadillados… de los castillos de Tierra Santa”. Ostras, como mucho de lo que nos habló Eloy en su libro del castillo de Mesones de los castillos de las órdenes religiosas en Tierra Santa, y de las influencias que habían traído a Europa estas. Y solo tenemos que ver, como ya comprobamos, los sillares del castillo-ermita de Castejón de Monegros, que ya conocemos, “almohadillados”, con los mismos signos de cantero, como vimos, que el castillo de Mesones, y el de Castellote; con escaleras, como ya vimos también, “templarias” (como es abajo, es arriba; como es arriba, es abajo) de la “fuente Madre”. Ermita dedicada, como vimos, a San Sebastián, el “soldado cristiano”, como el “monje guerrero”, que también estaba en la ermita templaria de Almodóvar del Río. Al final, se va a convertir esto en el mejor aliado para demostrar que el castillo de Mesones es un castillo templario; vamos, una de las mejores “CLAVES”. Y lo de los “marcianos”, será mejor ya olvidarlo.
Me sabe hasta malo que no haya nadie más que diga nada, viendo lo que está pasando. Efectivamente, el que no se haya leído todo, no sabe nada, ni tiene derecho a opinar. Por todo lo que has sacado, y por lo que dijo Eloy en su libro del castillo, no existen otras fechas en que nadie pudiera haber hecho aquí este castillo, semejante castillo.Y las fechas van tan justas que casi no les daría tiempo a construir el castillo, por lo que igual solo puede haber un año antes y un año después, como mucho. Más ajustado pues imposible. Como para que cualquiera, gratuitamente, como dices, hable sin saber aún nada del castillo, diciendo que no es un castillo templario, ni puede serlo, porque no se parece a otros templarios de España. Ya sabemos por qué es. La verdad lo único que demuestran, como bien dices, es que no saben nada de castillos. Qué pena. Como dices, los que están por ahí metidos se estarán frotando las manos. Y lo que no entiendo es que los de Mesones vean cómo les están tomando el pelo todo el mundo (por supuesto, los primeros, las Instituciones; además, la primera, la propia comarca, como ya sé, cuando tendría que ser todo lo contrario), y no hagan nada. Vamos, de auténtica vergüenza.
ResponderEliminarLo has dicho muy bien. Un recibo del pago de unas obras de D. Lope en el castillo ha servido para decir siempre que lo hizo éste. Porque lo de los escudos ya se veía que eran postizos, puestos en un castillo anterior. Debería haberse sabido desde el principio que lo que hizo el arzobispo fueron reformas. No había más pruebas. Tú has sacado ya cientos de pruebas, de todas clases, y todas concuerdan. Para que algún necio venga ahora a decir nada. Esto es increíble.
ResponderEliminarMe acaban de pasar lo que pone del castillo de Mesones el calendario de las visitas del mes de diciembre de la comarca:
ResponderEliminar"El castillo de Mesones de Isuela, del siglo XIV, es uno de los más grandes castillos palacio de señorío que existen en Aragón (siglo XIV) que perteneció a los templarios y a la casa de Luna. Un monumento testigo de grandes acontecimientos históricos como la guerra de los Dos Pedros que sirvió como fortaleza para defender las fronteras de Aragón".
Si alguien entiende algo que lo diga. Sin duda, está diciendo que es un castillo templario que se hizo entre 1300 y 1312, cuando desaparecieron los templarios.
Siempre se había dicho que es del siglo XIV pero que lo hizo d. Lope después de la guerra de los dos Pedros. A ver si se ponen todos de acuerdo todos porque si no la gente se va a hacer un lío con este castillo. Los forasteros nos van a tratar de tontos, ya me lo ha dicho alguno.
La verdad es que le están tomando el pelo a todo el mundo, no se cómo no se les cae la cara de vergüenza.
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