LA GRAN CAMPANA DEL CASTILLO

LA GRAN CAMPANA DEL CASTILLO

Las espectaculares dimensiones de la Torre suroeste dejan al visitante pequeño. Es la mayor de todo el castillo, tanto en diámetro como en altura, puede ser una de las torres de mayores dimensiones de castillos de su época en España, ya que mide 28 metros de altura hasta el nivel de la carrera en su parte más baja y su diámetro en su parte alta son 17 metros, (porque en su parte baja con su alambor es mayor, 20 metros), lo que hace que el área de esta torre tenga más de 53 metros cuadrados en su parte alta y casi 63 en su parte baja.

 

Este artículo apareció publicado en el Facebook de Mesones el 24 de abril de 2021 con el siguiente título:

¿ES CIERTO QUE HABÍA UNA ENORME CAMPANA EN LA ACTUAL SALA DONDE SE ENCUENTRA EL CAMPANILLO DEL CASTILLO?

Lo reproduzco a continuación:

El otro día hablando con Evelio, me comentó que Carlos Molinero le había dicho que antiguamente en el castillo había una campana enorme donde se encuentra el campanillo, que en su día se quitó y la cual fundieron, haciendo con dicha campana el actual campanillo del castillo y las dos campanas de la Iglesia Parroquial de la Asunción de Mesones. Y que además esa campana la habían fundido en un horno que había en el pueblo, concretamente en la casa de Cirilico que tiene en la plaza, algo que me sorprendió mucho.

Panorámica de la torre del campanillo.

No me quedaba otra que preguntar a los más viejos del pueblo.

Hablé con Cirilico, el cual me confirmó que su abuela y su padre siempre le habían hablado de la campana enorme del castillo que habían fundido en su casa, de la cual hicieron el campanillo del castillo y las campanas de la iglesia parroquial de Mesones, en la cual efectivamente había un horno que cerró, tabicándolo con una pared, estando todavía el hueco detrás del tabique y conservando varias piedras del horno. También me dice que esa casa la compró su familia ya con el horno construido.

“Cirilico” sabe muchas cosas de Mesones de los que pocos ya se acuerdan

Mi tío José Mª Cimorra, de 92 años, me dijo que siempre había oído a su padre y abuelos que en el castillo de Mesones había una campana enorme, con tal potencia de sonido que cuando se tocaba se oía en todo el término de Mesones y pueblos de alrededor, incluso en la localidad de Épila, que está en sentido contrario a la orientación de la campana. Pero, según comentaban los mayores, una vez se tocó la campana cuando no debía de tocarse y acudieron con urgencia de todos los pueblos de alrededor a Mesones pensando que algo grave ocurría. Y ese fue el motivo desencadenante para que decidieran quitar la gran campana, fundirla y hacer con esa campana el campanillo actual y las campanas de la iglesia parroquial de la Asunción.

Mi tío “José” Cimorra, el más “viejo” del pueblo. Ahora ya tiene 93 años y aunque la vista le falla, su cabeza le rige muy bien, te cuenta historias que nadie conoce. La de la campana gigante es una de ellas.

Estos días que he estado en el castillo he podido comprobar que en el muro donde se encuentra el campanillo hay un hueco enorme cerrado con yeso, donde claramente iba la gran campana, que con su potencia de sonido, en caso de peligro, se aseguraba que se enteraran los vecinos del pueblo que estuvieran trabajando en el término y gentes de los pueblos de alrededor, bien por ataques de enemigos, incendios o cualquier otra calamidad, y también pudieran recogerse rápidamente en el interior del castillo (siempre hemos visto allí ese trozo de pared donde se encuentra el campanillo hecha con yeso y piedras, que nada tiene que ver con la construcción de sillares del castillo, pero no sabíamos por qué estaba así; para poner un campanillo pequeño como el que hay no hacía falta hacer todo eso; y tampoco teníamos buenas fotos desde el exterior, al estar tan alto, de cómo era por esa parte todo eso; ahora, parece ser, ya lo sabemos todo; y todo gracias a la sabiduría popular).

Adornos góticos en la ventana del campanillo.

Probablemente en la guerra de sucesión, entre los años 1701-1713, donde la defensa del valle del Isuela por parte de los partidarios del archiduque Carlos estaría en el castillo de Mesones, sería cuando pusieron la campana grande del castillo, rompiendo el “oratorio privado” del arzobispo que había en esa torre.

¿Cuándo la quitaron? No lo sé, quizás fuera a partir de la desamortización de Mendizábal en 1836. También puede ser que haya documentación en el Ayuntamiento de Mesones. Si alguien puede aportar alguna información más, se agradecería...

Torre del campanillo a vista de dron. Vemos el hueco gigante que hay para un pequeño campanillo y que está relleno con piedras, yeso y ladrillos para adaptarlo al hueco.

Bóveda de la sala de la “Felipa”.

Como ya he comentado, el castillo de Mesones se convertiría en la guerra de Sucesión en el eje de la defensa del valle del Isuela. El castillo de Tierga lo desmantelaron en 1706 las tropas del archiduque Carlos al haber declarado su consistorio en un principio el apoyo a Felipe V. No solo pondrían ahora la gran campana en el castillo, sino que la sala de la Felipa se ve que la utilizaron en estos momentos como cocinas de la guarnición instalada en esta fortaleza, haciendo arriba un agujero para que saliera el humo (como en la Edad Media), el cual cerraron hace unos años (de pequeños ya vimos que era un verdadero peligro acercarte por allí, ya que no tenía ninguna protección y te podías caer abajo). De ahí que las paredes de esta sala estén tan negras. Con la derrota de los carlistas en 1610 en Brihuega y Villaviciosa (Guadalajara) los felipistas se harían de nuevo cargo del castillo. El 3 de mayo de 1712 muere en Mesones un soldado al que se le inscribe solo como Antonio.

Por cierto, la sala de la Felipa, la otra torre octagonal del castillo, que se cierra también con bóveda, como la almena alta (las únicas del castillo; otro alarde constructivo, pero solo para este tipo de formas “templarias”; quizás fueran las únicas que no tuvo que reconstruir D. Lope; lo único que hizo en ésta fue cambiar el “escudo”-se ve claramente la “ñapa”-; sería cuando tapó la puerta original de esta torre y reforzó la pared de dentro, por fuera, para hacer el aljibe de las caballerizas, y de su fuente). Y como toda construcción templaria octagonal debía guardar también un secreto, como ya sabemos. Quizá fuera también, como en la otra, alguna “trampilla”, en este caso, para comunicar con el túnel, como ya vimos. Y ya vimos también que tenía matacanes interiores (otra torre “guerrera”). Quizá, por ello, la habitación de otro “jefe”, éste, pueda ser, más “guerrero”.

Vemos a la izquierda arriba la piedra que pusieron hace poco para tapar el agujero que hicieron para salir el humo.

Escudo de D. Lope en la clave de la cúpula de la sala 

“la Felipa”.

Y hasta parece que ha querido aparecer la figura de un Papa sentado. No sabemos qué es lo que podría haber antes en esta clave. Igual una manera de comprobarlo era darle la vuelta a la piedra, por si la aprovecharon para labrarla por detrás. Quizá era lo más sencillo. No deja de ser una buena posibilidad.

Y en este reportaje alguien comentó lo siguiente:

También se hicieron el campanillo de San Vicente y el de San Roque. En total se hicieron los tres campanillos y las dos campanas de la torre de la iglesia.

 

Campanas de la torre de la iglesia.

Campana 🔔 de San Vicente.

Y yo comenté también esto:

 

Siempre se ha dicho (seguramente porque se le ocurrió a alguno y ya todos han seguido) lo del oratorio privado de D. Lope; pero, vistas las fotos de detalle desde fuera, parece una gran ventana (no nos habíamos dado cuenta, al estar tan alto desde abajo), decorada por arriba como otras, como la de la sala de la Felipa, que es un balcón festejador. Seguramente también éste lo era. Además, también tiene bancos para sentarse y una ventana grande. Y por algún sitio tenía también que entrar la luz a la sala; pues, como la de la sala de la Felipa; porque los ventanales tan altos no eran suficientes. Un oratorio con una ventana tan grande enfrente no se entiende, además, tampoco rezar hacia el oeste (ya lo llamó Eloy en su libro del castillo, la capilla del diablo). Pero, rezar hacia una ventana, hasta tenía que ser molesto por la luz. Poco a poco se van descubriendo nuevas cosas sobre el castillo que antes estaban mal fundamentadas y, por lo tanto, eran erróneas.

Podemos observar claramente en esta fotografía que el hueco del campanillo en origen era una gran ventana para una de las habitaciones señoriales del castillo.

Preciosos detalles florales góticos en el hueco donde colocaron el campanillo. Vemos que tuvieron que reducirlo, rellenándolo de ladrillos, yeso y piedras.

Y en otra publicación, después, cuando apareció esta torre, dije lo siguiente:

 

Se supone que era su habitación (la de D. Lope), ahora, la habitación principal de su palacio, y por eso hizo el balcón festejador más grande y más lujoso, decorado; lógicamente, orientado al sur, al sol que más calienta. Carlos dijo que al limpiar la sala salían también trozos de teja. También salían tablas; seguramente el suelo era de madera, de tablas, de "parquet" (mucho más cálido). Y ya sabemos que hay hasta una chimenea (que ya sabemos que en ese tiempo no eran para cocinar, sino para calentarse).

 

El coronel Ubiña en el plano que realizó del castillo de Mesones, a esta torre la llamó “ el torreón de la campana”. En 1839 aún estaba, pues, la gran campana.

Todavía se observa el suelo original de la torre. A la derecha vemos la chimenea de la estancia. Seguramente, encima de este suelo habría tablas, el suelo sería de madera, mucho más cálido.

Escudo de D. Lope en la clave de la cúpula.

Balcón festejador, el preferido de los mesoneros.

La chimenea. Vemos bastantes sillares de piedra negra traída de Rodanas (en Morata no hay de esta piedra).

Salida de humos de la chimenea.

Es muy probable que el techo de esta torre fuera desmontado ya en la guerra de Sucesión (quizá fue el primero de todas las torres) con el fin de que el sonido de la gran campana que pondrían por entonces se oyera en todas las direcciones. Por ello no es de extrañar que dijeran que se oía hasta en Épila. Con el techo igual no hubiera llegado hasta allí. Quizás, en las actas del Ayuntamiento haya algo de esto.

En este momento los condes de Aranda estarían "desaparecidos". La mayoría de los nobles apoyaron al rey (al primero, ya que los dos juraron los fueros en la Seo). Quizás empezara a desmantelarse el castillo ahora. La mayoría de los nobles apoyaron a Felipe V. Los que no, tuvieron que irse de España y les confiscaron todos sus bienes. Con ello, el rey se hizo "rico". El tejado de esa torre ya no se reconstruyó y el resto correría después la misma suerte.

Es muy probable, pues, que esa gran campana la pusieran durante la guerra de Sucesión, desmantelando el techo de dicha torre para que se oyera mejor (comenzando, pues, con esto el desmantelamiento del castillo; quizás, la desamortización haría después el resto), y con el objetivo presumible de avisar a todos los pueblos de la comarca por si venían los felipistas. Al final, vinieron. Probablemente fueron estos ahora los que arrojaron al río Aranda, que estaba debajo, los huesos del Papa Luna cuando saquearan el castillo palacio de Illueca. 

 

El campanillo.

Y cuando descubrí el informe del coronel Ubiña, en el que hablaba del “torreón de la sala dorada”, el de la almena alta, ya pude sospechar que, si existía algún oratorio privado de D. Lope en el castillo, éste estaría aquí, y no en el balcón festejador de sus aposentos, el más lujoso de su palacio, donde pusieron siglos después, como hemos visto, la “gran campana del castillo”.